KYRIE ELEISON

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fuera de la ley

07

   

sobre la morada de Dios

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Dicen las escrituras, vino Dios a morar con nosotros.... pero ¿para quedarse con nosotros, o para llevarnos con Él?
¿Dónde levantó Jesús su palacio? Muchos dirán “El Reino invisible, no ostensible, Reino de los Cielos, ése es el palacio de Jesús” Y mienten, porque visitan templos de piedra y mármol, templos suntuosos que producen repugnancia nada más imaginar que tengan alguna relación con la predicación de Cristo.

No voy a contradecir las escrituras... ¡líbreme Dios! Pero el Dios que habita dentro de mí y que tiene toda la autoridad, Él, con su autoridad me habla, y yo simplemente digo lo que Él me dice:
Dios no vino a apoltronarse con nosotros, sino a sacarnos de nuestra triste y mezquina morada y llevarnos con Él. ¿Son estas verdades obvias y hasta ya resobadas y manidas para todos los cristianos? ¡Teatreros, comediantes, bufones! Pretenden tener a Dios atrapado en el mundo mediante chantajes afectivos. Inventan debilidades insuperables para robar su misericordia.
Alguien dirá, ¿quién eres tú, asqueroso pecador, para expresarte en esos términos? Y yo respondo: ¿Dónde está escrito que un pecador no pueda decir la verdad?

Que Dios venga a quedarse o que venga a llevarnos con Él puede parecer un matiz necesario de puntualizar, pero al tiempo un asunto de fácil aclaración.
¡Se equivocan¡ Es uno de los ejes del gran error de la religión cristiana.
Soy cristiano comprometido, practico en la iglesia católica (sin excluir a ninguna otra), siento un respeto sublime por el misterio de la eucaristía, pero yo NO pertenezco a la religión católica, simplemente porque yo no pertenezco a ninguna religión ni comparto ese término de “religión” que, dejando aparte su contenido etimológico, hoy por hoy considero que tiene un contenido absolutamente pagano.