anterior

índice

siguiente

clamor a la Justicia divina 

Salmo 054

¡Padre mío, hazme Justicia! Hazme Justicia, Padre, aunque yo mismo me vea acusado, pues ahora más que nunca necesito purificarme en tu Luz; ahora más que nunca, porque me buscan para acusarme.
No me acusan para salvarme, sino para destruir mi testimonio, por eso te pido, Padre, que me limpies Tú antes de que ellos me alcancen.

Mi Padre es cariñoso. Cuando reconozco mis errores, Él los convierte apoyo de su providencia. Así, todo da fruto: nada es infecundo cuando ha sido puesto en sus manos.
El que me quiere acusar no encuentra mi culpa. Viene decidido, sus acusaciones razonadas y probadas, sin embargo debe volverse por donde vino: No hay dureza en mi corazón por donde asirme.

anterior

índice

siguiente